• Imperfecciones, arrugas finas, surcos y flacidez cutánea.
• Acumulación de agua, grasas y toxinas (Celulitis).
• Secuelas de acné, cicatrices, pequeñas estrías.
• Decoloración de la piel, manchas producidas por exposición solar.
• Marcas causadas por quemaduras.
• Casos severos de arrugas en la piel.
• Cicatrices profundas como de varicela y acné.