1. Aplica tonos muy ligeros con matices melocotón, que no aparentan casi maquillaje.
2. Conviene destacar más los ojos que los labios, resaltándolos con tonos carne o melocotón menos difuminados que de costumbre.
3. Es imprescindible el uso de eye-liner perfilador y rimel, mejor resistente al agua, por si acaso la novia llora durante la ceremonia.
4. Después un perfilador de labios con efecto larga duración y una barra anti-huellas con efecto anti-besos.
5. Son básicos, los correctores de luz para aplicar debajo del maquillaje. Primero se extiende el corrector blanco en una capa muy fina por toda la cara para dar más luminosidad.
No hay que olvidar los otros tres tonos de corrector: el verde para cutis con cuperosis o cara sonrojada, lila para la piel cetrina, y albaricoque para aportar luminosidad en pieles morenas.
6. No pierdas tu personalidad con un estilo de maquillaje demasiado extravagante. Debes encontrarte guapa, pero nunca demasiado rara. Si habitualmente te maquillas mucho, para esta ocasión maquíllate incluso un poco menos. La naturalidad es importante.
7. La armonía y la coordinación de colores es todo un clásico que darán a tus recuerdos un toque intemporal. Olvida los detalles fashion y cuida los detalles. Por ejemplo: elige el color de labios a tono con las uñas y siempre sobre unas manos muy cuidadas. El esmalte también se puede sustituir por brillo o un tono claro y discreto.
8. Empieza a cuidar la piel un mes antes de la boda mediante un tratamiento de limpieza de cutis y mascarillas hidratantes.
9. Y por supuesto ese día, intenta dormir todo lo que puedas. Es el mejor secreto para estar guapa.
10. Para los retoques, te serán imprescindibles los polvos compactos y la barra de labios.
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